El queso es probablemente uno de los alimentos más versátiles que existen, ya que se puede tomar tanto en recetas dulces como en saladas y combinar de mil formas distintas en una gran variedad de platos. Con él se pueden incluso realizar postres sencillos que siempre triunfan por eso queremos darte las claves para que sepas qué queso combina con membrillo y hagas esta sabrosa propuesta en pocos minutos.
Queso para comer con membrillo
Por lo general las frutas suelen combinar de forma espectacular con el queso, y es muy habitual verlo junto a uvas, manzana y mermeladas de fresa, de tomate o de higos. Otro clásico que no puede faltar es el membrillo, o mejor dicho el dulce de membrillo que se elabora con él y que también se conoce como “carne de membrillo”.
Para saber cuáles son las mejores combinaciones, primero debemos conocer un poco más sobre el membrillo. Y es que se trata de una fruta de aspecto similar a la pera, pero poco o nada tiene que ver con ella, especialmente en lo relativo a su sabor y textura.
La dureza de su carne y su característico sabor agrio con un marcado regusto áspero que se queda en el paladar hacen que el membrillo no sea apto para comer en crudo. Sin embargo, una vez cocinado la cosa cambia mucho, gracias sobre todo a la gran cantidad de pectinas que posee y que logran transformarlo haciéndolo más dulce, incluso almibarado, de ahí que se suela consumir en jaleas, zumos, mermeladas o el típico dulce de membrillo.
Aunque en un primer momento podamos pensar que el dulce de membrillo con queso admite cualquier tipo de queso que le queramos añadir, su maridaje puede tener muchos matices distintos según la variedad escogida. Y ahí es donde reside también el punto fuerte de esta combinación: el gran juego de sabores y presentaciones que se pueden hacer, que consigue que este tradicional combo siga estando entre los mejores después de tantos años.
Además, podremos inclinarnos por una u otra opción dependiendo también de cómo deseemos presentar este bocado: como picoteo en casa para una cena informal con amigos o como broche goloso en una comida familiar, por ejemplo.
Entre las variedades de queso para comer con membrillo más populares están:
- Los quesos cremosos como el mascarpone o el queso fresco, opciones frescas y suaves muy indicadas para acompañar el membrillo como postre. Son quesos que coordinan bien con este dulce, armonizando su sabor y dejando que predomine el toque dulzón.
- Los quesos azules como el cabrales o el roquefort, un tipo de queso con membrillo de sabor potente que contrasta muy bien con el aporte dulce del membrillo en tapas o bocados salados, haciendo que ambos productos se equilibren en boca.
- El queso de oveja manchego, un queso reconocido por su sabor y su textura firme tanto si es curado como semicurado y que funciona realmente bien con el membrillo porque le aporta el contraste justo entre dulce y salado. Por esto mismo, ninguno de los dos “pisa” al otro y se puede disfrutar tanto en tapas, como entrante de un menú o como postre.
¿Cómo comer queso de oveja con membrillo?
Como ya hemos dicho, el membrillo no se puede consumir en crudo, pero sí cocido. Podemos comprarlo ya listo para tomar en una gran superficie o supermercado en distintos formatos en cualquier época del año o aprovechar la temporada de membrillo, que es normalmente entre julio y octubre y realizar nosotros mismos nuestro dulce de membrillo.
Y ahora bien, ¿cómo se come el membrillo?
Su elaboración no tiene ningún misterio y para disfrutar de todo su sabor solo necesitaremos los membrillos pelados y cortados en trozos (puede ser en gajos o en cubos), agua y azúcar y cocinarlo en una cazuela u olla durante unos 15 minutos a fuego medio. Normalmente por cada kilo de membrillo, añadiremos 250 gramos de azúcar y la cantidad de agua suficiente para que cubra los trozos de membrillo.
Pasado este tiempo lo trituramos bien y volvemos a poner al fuego hasta que la mezcla tome espesor, dejando la masa enfriar en un recipiente rectangular y con cierta profundidad. Cuando ya esté fría, la llevamos al frigorífico y dejamos que termine de solidificar.
Cada vez que deseemos dulce de membrillo, bastará con sacarlo de la nevera y cuidadosamente con el cuchillo cortar una porción.
Queso con membrillo: recetas para chuparse los dedos
Las opciones son tantas y tan ricas que no podemos quedarnos solo con una, así que aquí tienes 3 sugerencias irresistibles y muy resultonas:
Ensalada de canónigos, queso de oveja, membrillo, pera y nueces
Una receta que se hace en un abrir y cerrar de ojos, saludable y sabrosísima que une en un mismo plato el punto dulce de la fruta con la intensidad del queso manchego y la frescura de los canónigos. Podemos añadirle una vinagreta casera de aceite de oliva, vinagre de manzana, hierbas aromáticas, sal y pimienta.
Tostas de queso de oveja con membrillo
Tostamos las rebanadas de pan en el horno y una vez hayan tomado el color adecuado, aprovechamos el calor residual para añadirles una fina cuña o triángulo y que se funda un poco.
Sacamos del horno y ponemos encima un rectángulo de membrillo, y sobre él un poco de pimienta molida o de tomillo para darle más fuerza.
Una tabla de quesos con membrillo, uva y frutos secos
Algo a lo que nadie puede resistirse y que admite distintas combinaciones. En un plato grande o una pizarra alargada añade cubos de queso de oveja curado, semicurado y tierno y para separar cada grupo utiliza almendras tostadas sin sal, nueces, uvas blancas y/o negras y cuadraditos de membrillo.
Preparar un delicioso y atemporal bocado sabiendo qué queso combina con membrillo puede darte muchas ideas e inspiración para disfrutar del queso de otras formas tan apetecibles, saludables y divertidas, creando interesantes combinaciones de primero, de segundo o de postre. ¡Todo es posible con un buen queso!
